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Algunas disciplinas de salud alternativa defienden la idea de que hay que eliminar "toxinas" del cuerpo mediante tratamientos a base de hierbas, vegetales varios, electricidad o electromagnetismo. No solo no especifican las toxinas que tratan, sino que sus aseveraciones no se encuentran sustentadas por la ciencia.
En realidad sí existen procedimientos médicos de desintoxicación, en situaciones de gravedad se realizan en los hospitales, cuando una persona ha ingerido algún producto tóxico. Consisten en la administración de un medicamento que obliga al cuerpo a expulsar esa sustancia para así salvar la vida del paciente y restablecer su salud.
La idea de que necesitamos purificar nuestro cuerpo no es nueva, está detrás de muchos rituales ancestrales y de procedimientos médicos antiguos. De hecho hemos cambiado ciertos conceptos místicos o ideas médicas antiguas por las toxinas, en teoría restos y desechos de los alimentos que se quedan en nuestro cuerpo, se adhieren a los intestinos, se pudren y nos enferman desde dentro, aterrador, ¿no?.
Tranquilos, esto no es cierto, en torno al año 1900, y a medida que aprendíamos más sobre fisiología, anatomía y las verdaderas causas que hay tras las enfermedades, la ciencia terminó por descartar la idea de la autointoxicación: resulta que nuestro cuerpo es perfectamente capaz de librarse de todo aquello que no necesita con sofisticados órganos y sistemas que llevan millones de años evolucionando para cumplir eficazmente con su tarea.
Otra de las ideas antiguas usadas por muchas religiones para la desintoxicación es el ayuno. El cristianismo, el islam, y el judaísmo, lo practican. El ayuno también es una característica de las tradiciones ascéticas en religiones como el hinduismo y el budismo. Las tradiciones mahayana que siguen el Sutra de la red de Brahma suelen recomendar que los laicos ayunen durante seis días de cada mes y tres meses al año". Los miembros de Baháʼí Faith observan un ayuno de diecinueve días desde el amanecer hasta el atardecer durante el mes de marzo.
Otra de las bases del timo del “detox”, es la idea de que lo químico es malo en contraposición a lo natural, que es muy bueno. Como si la naturaleza no fuese química, o como si la química no fuese una característica de la naturaleza. Es decir, como si la fotosíntesis no fuese un proceso químico, y este no fuese a su vez un proceso totalmente natural.
Esto impulsa la idea de que frente a un estilo de alimentación natural y saludable, lo químico y artificial es perjudicial.
Así que comiendo alimentos que contienen estos “químicos”, llenamos el organismo de "toxinas" que provocan enfermedades. Aún así, nadie termina de explicar completamente como nos enferman estos “químicos”. En teoría nos producen síntomas muy generales, como dolores de cabeza, fatiga, insomnio, falta de apetito ... y por otra parte es raro que alguien no padezca estos síntomas alguna vez, o incluso de vez en cuando, y claro, se refuerza la teoría de "lo detox".
Una revisión de 2015 de ensayos clínicos sobre las dietas de desintoxicación, concluyó que no hay pruebas convincentes que respalden el uso de dietas de desintoxicación para controlar el peso o eliminar toxinas. Es decir, que después de haberlas sometido a todo tipo de análisis, podemos afirmar que no son eficaces.
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Teniendo en cuenta los gastos económicos para los consumidores, las afirmaciones sin fundamento y los riesgos potenciales para la salud de los productos de desintoxicación, deben ser desaconsejados por los profesionales de la salud y sujetos a una revisión y supervisión reglamentarias independientes.
Según la Clínica Mayo, las "toxinas" por lo general no se especifican y hay poca o ninguna evidencia de acumulación tóxica en los pacientes tratados. Según una hoja informativa de la Asociación Dietética Británica, toda la idea de la desintoxicación es una tontería. El cuerpo es un sistema bien desarrollado que tiene sus propios mecanismos incorporados para desintoxicar y eliminar los desechos y las toxinas". Insisten en que se trata de un mito de marketing.
La organización Sense about Science investigó diversos productos de supuesta "desintoxicación", calificándolos como una pérdida de tiempo y dinero. Dando su estudio como resultado un informe que concluyó que el término es utilizado de manera diferente por diversas compañías, la mayoría no ofreció evidencia para respaldar sus afirmaciones, y en la mayor parte de los casos, se trata de un nombre con fines comerciales.
Pero es que la ciencia no funciona así, y para asegurar que una sustancia produce unos síntomas hay que poder demostrarlo. De hecho, para que una sustancia o producto destinado a la alimentación pueda comercializarse debe pasar una serie de pruebas en las que demuestre todo lo contrario, es decir, que es seguro para los consumidores.
El cuerpo humano es capaz de mantenerse a sí mismo en buenas condiciones, con varios órganos dedicados a limpiar la sangre y los intestinos. Alan Boobis, profesor y toxicólogo del Imperial College London, afirma que teniendo en cuenta que el entorno en que evolucionamos los seres humanos es hostil, los sistemas de desintoxicación propios del cuerpo son notablemente sofisticados y versátiles, y recalca lo sorprendente de que haya personas que quieran arriesgarse a alterar seriamente estos sistemas con dietas de "desintoxicación" no probadas, que podrían causar más perjuicio que beneficio.
El divulgador científico Brian Dunning investigó el tema en 2008 y concluyó que "Cualquier persona interesada en desintoxicar su cuerpo podría pensar en prestar un poco más de atención a su cuerpo y menos a las personas que intentan obtener su dinero.
A pesar de la base científica poco sólida, la desintoxicación es popular y los productos y regímenes de desintoxicación se han convertido en una tendencia de salud rentable. Al igual que con otros tratamientos de medicina alternativa, la eficacia se ha atribuido al efecto placebo, las mejoras psicosomáticas o la recuperación natural de enfermedades que se habrían producido sin el uso del producto.
A principios del siglo XX, el ayuno fue promovido por escritores de salud alternativa como Hereward Carrington, Edward H. Dewey, Bernarr Macfadden, Frank McCoy, Edward Earle Purinton, Upton Sinclair y Wallace Wattles. Todos estos escritores estaban involucrados en la higiene natural o en el movimiento del nuevo pensamiento. El sistema pseudocientífico de curación por dieta amucosa de Arnold Ehret propugnaba el ayuno.
La higiene natural es una rama de la naturopatía que defiende una filosofía de "vida natural" que se desarrolló a principios del siglo XIX. Los higienistas naturales se oponen a los medicamentos, la vacunación, la mayoría de los tratamientos médicos y respaldan el ayuno, la combinación de alimentos y las dietas vegetarianas o de alimentos crudos.
El movimiento del Nuevo Pensamiento, fue creado por Phineas Quimby en 1854, que aseguraba que era capaz de curar con la mente, y abrió un gabinete en Maine donde aplicaba sus supuestas capacidades, al tiempo, que difundía sus creencias.
Linda Hazzard, una curandera notable, sometió a sus pacientes a ayunos tan estrictos que algunos de ellos murieron de hambre. Fue responsable de la muerte de más de 40 pacientes bajo su cuidado.
En 1911, Upton Sinclair escribió The Fasting Cure, donde hacía afirmaciones sensacionales de que el ayuno curaba prácticamente todas las enfermedades, incluido el cáncer, la sífilis y la tuberculosis. En 1932, el médico Morris Fishbein fue de los primeros en denunciar el ayuno como una dieta de moda y decir que el ayuno prolongado nunca es necesario e invariablemente hace daño, a veces irreparable.
Más allá de eso, la idea de que "lo químico" es malo es absurda. El arsénico es natural y es venenoso, y la aspirina se hace en un laboratorio y es un excelente analgésico.
Muchos de los defensores de los métodos detox plantean un funcionamiento del cuerpo en el que el hígado y los riñones son filtros que retienen las sustancias de desecho y que de ahí se expulsan físicamente del cuerpo. Pero siempre quedan "restos" y por eso de vez en cuando hay que purificar o desintoxicar estos órganos. Pero en realidad, lo que hacen los riñones y el hígado es llevar a cabo una serie de reacciones químicas que transforman esos desechos para que se puedan eliminar con facilidad.
Ambos órganos se desintoxican solos y, a no ser que se padezca alguna patología hepática o renal, no es necesaria ayuda alguna para que ejecuten sus funciones. Y si no fallan, lo que corresponde es una visita al hospital más próximo, posiblemente con carácter urgente.
Escucha el podcast Radiografia de la conspiranoia Temporada 2 - 9. Goop, la empresa pseudocientífica de Gwyneth Paltrow:
Este es un podcast de Cesc Fortuny i Fabré, de divulgación académica y científica sobre las teorías de la conspiración, así como sectas, estafas y pseudociencias. También brinda información sobre ingeniería social, y como protegerse de ella.
Este capítulo trata sobre la empresa de Gwyneth Paltrow Goop, y de como vende pseudociencia, con el carisma de la actriz. De la serie Estafas, bulos, FakeNews ...
Voz para la presentación y la despedida: Marian Raméntol
Locución: Cesc Fortuny i Fabré
Música de la presentación y la despedida: "Tenencia ilícita de almas" K4RK4554
Música del podcast: "El meu nom fondejat als llavis de l'infern" O.D.I.
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