“El tema de la acupuntura (del latín, pinchazo con una aguja), suscita más susceptibilidades que la homeopatía, y en parte lo hace por el hecho de estar mucho más revestida de técnica y de método. Aún más cuando se ha dicho que resulta eficaz contra el dolor, y que se pueden realizar intervenciones quirúrgicas sin mayor apoyo anestésico que las agujas. Médicos en todo el mundo ensalzan sus beneficios, e incluso algunas organizaciones y colegios se lanzan a proclamar que la misma OMS avala esta técnica supuestamente milenaria. ¿pero todo esto es cierto?, ¿así, tal y como lo indico? ¿es realmente la acupuntura una técnica milenaria que ha sobrevivido a los siglos debido a su maravillosa eficacia?”
Actualmente, la aplicación más común de la acupuntura es el tratamiento del dolor, y en la mayoría de los casos es usada para acompañar terapias científicas, casi nunca como tratamiento principal. Algunos anestesiólogos, mantienen que puede considerarse en el tratamiento del dolor lumbar inespecífico y no inflamatorio solo en conjunto con el tratamiento de uso común. Pero debe señalarse aquí que un dolor lumbar no específico, es aquel cuyo origen físico no ha sido determinado, que no sea inflamatorio indica que no ofrece ninguna inflamación, por tanto podemos inferir que estamos hablando de un dolor lumbar del que no se conoce la causa, y que no ofrece muestras que se puedan examinar. Esto es algo común en muchas pseudoterapias, ofrecen solución a problemas que casi siempre por falta de concreción no son posibles de abordar, y también normalmente, ofrecen más un sustento anímico que una verdadera solución palpable a las dolencias, más si tenemos en cuenta que estas tampoco son en su mayoría demasiado palpables.
Las sesiones que suelen practicarse en las “clínicas” de acupuntura suele durar de veinte a sesenta minutos, en los que al sujeto se le pueden llegar a clavar unas veinte agujas de media. Se puede aplicar calor o no, así como presión, luz, corriente eléctrica, etc … Hay un aspecto de vital importancia para comprender la naturaleza del fenómeno de la acupuntura, que va mucho más allá de discutir sobre si realmente se liberan endorfinas con las punciones, o si realmente existe una fuerza mágica que fluye por el cuerpo. Un diagnóstico y un tratamiento a un conjunto de síntomas que refiera un paciente no son objetivos en acupuntura y dependen completamente de la apreciación del pseudoterapeuta, la terapia con acupuntura es un proceso individual y se basa en la filosofía y la intuición, y no en la investigación científica, por tanto un "terapeuta" seguirá unas pautas con un paciente, pero otro "terapeuta" aplicaría forzosamente otras para el mismo paciente y para las misma dolencias. Lo cual nos lleva entre otras cosas a que las segundas opiniones no tengan cabida en el ámbito de la acupuntura.
Esta idea se refuerza todavía más cuando apreciamos las diversas formas de entender la acupuntura que se practican en la actualidad, que tienen una metodología distinta, y que entienden que los puntos de inserción están situados en lugares distintos del cuerpo, es decir que no existe un consenso ni un estándar para determinar la posición y función de los diferentes puntos de acupuntura y que cada método (a tenor de las diferentes culturas que practican la acupuntura) aplica soluciones distintas, sino antagónicas, para un mismo problema.
Con tal de hacer un diagnóstico, y de acuerdo con la tradición utilizada, el acupuntor inspecciona e interroga al paciente. El proceso más extendido en occidente, que proviene de la medicina tradicional china consta de inspección, auscultación y olfato, palpación e indagación.
Se inspecciona el rostro y en especial la lengua, su tamaño, forma, tensión, color y recubrimiento, así como la ausencia o presencia de marcas de dientes alrededor del borde. Se auscultan sonidos particulares como sibilancias y se presta especial atención al olor corporal. El tacto se utiliza para sentir el cuerpo buscando puntos sensibles y para tomar el pulso. La indagación es una entrevista destinada a conocer las "siete preguntas": escalofríos y fiebre; transpiración; apetito, sed y sabor; defecación y micción; dolor; sueño; y menstruación y leucorrea.
En Japón se empezó a usar la acupuntura por influencia China hace unos 1500 años, se suelen usar en general menos agujas, y las punciones cuando las hay, son de menor profundidad. Se utiliza también un sistema de meridianos propio, que no se corresponde con los meridianos de la medicina tradicional china, y acepta la existencia del qi. Se pueden utilizar aderezos como la meditación, por ejemplo en el Toyohari, o masajes y manipulaciones del cuerpo, como en el método Manaka, el uso de plantas, como la artemisa o abrótano procedente de Asia menor, para preparar moxa y realizar moxibustión.
La acupuntura coreana utiliza inserción de agujas en puntos del cuerpo, sobretodo de la mano, donde hace especial énfasis, y gusta también de un sistema propio de meridianos que tampoco se corresponden con los meridianos de la medicina tradicional china, también reconoce la existencia del qi. Los puntos de presión pueden ser estimulados a través de una mezcla de métodos que van desde la inserción y la retirada de agujas muy pequeñas o el uso la moxibustión. Modernamente, también se estimulan presuntamente los puntos con láser, masaje y medios eléctricos. En algunos momentos intervienen la meditación y la aromaterapia.
La acupuntura en Vietnam se caracteriza por usar agujas de hasta 40 centímetros, como en el estilo denominado Mang Cham, que se practica con un juego de 9 agujas de diferentes tamaños. Modernamente han incorporado el uso de corrientes eléctricas, técnicas en las que se han especializado. También se basa en un sistema de meridianos diferente, aunque acepta la “existencia” de la fuerza mágica qi.
La acupuntura en la India merecería un artículo a parte, y quizás lo escriba, pero de momento resumiré diciendo que se basa en los marmas. Decir que los marmas son los meridianos indios, es como decir que los dátiles son las coliflores de África. Se define como punto marma, el lugar anatómico donde músculos, venas, ligamentos, huesos y articulaciones se encuentran. Es una zona que tiene relación a través de los canales pránicos con varios órganos internos. En el ámbito de la medicina tradicional de la India, también llamada Ayurveda, representan puntos donde se unen el cuerpo y la mente. Si bien se usan agujas, la técnica ni se basa ni tiene nada que ver con la acupuntura de la medicina tradicional china.
La acupuntura Maya o masaje espiritual Maya, es un pseudoterapia de nueva cuña que no mantiene ningún vínculo con la tradición oriental. En los pueblos y comunidades mayas de Yucatán se practican diversos tipos de masaje que se distinguen por las técnicas y el enfoque en el tratamiento de diversos males. Se practica una forma de masaje que se conoce de manera genérica como Jet, usando ungüentos, linimentos, alcoholes, bálsamos, etc.
Los hueseros, que acomodan huesos, atienden luxaciones y fracturas. También trabajan con ungüentos, linimentos y bálsamos.
Escucha el podcast de la serie Pseudociencias, Temporada 1, capítulo 6. El origen comunista de la acupuntura:
Este es un podcast de Cesc Fortuny i Fabré, de divulgación académica y científica sobre las teorías de la conspiración, así como sectas, estafas y pseudociencias. También brinda información sobre ingeniería social, y como protegerse de ella.
Este capítulo trata sobre los orígenes políticos y nacionalistas de la acupuntura, relacionados con el régimen comunista de Mao Zedong. Pertenece a la serie dedicada a las pseudociencias.
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