Osteopatia I, principios e historia

Andrew Taylor Still

 

La osteopatía es un tipo de terapia pseudocientífica que enfatiza la manipulación física del tejido muscular y los huesos del cuerpo. Se basa en la idea no probada de que las manipulaciones manuales del sistema musculo esquelético y las técnicas de liberación miofascial proporcionarían alivio a los trastornos funcionales, así como a muchos tipos de enfermedades

La osteopatía se considera una pseudoterapia porque al igual que la quiropráctica, está basada en conceptos que no han sido probados, como que todo el organismo está interconectado, en el sentido de que si te cortas una uña afectas al funcionamiento de tus riñones, o que manipulando los huesos y músculos se pueden curar enfermedades no relacionados con los músculos y huesos, como dolores de cabeza, asma, esquizofrenia, migrañas, menstruaciones dolorosas, síndrome de déficit de atención, problemas digestivos, depresión, etc …

La osteopatía, se presenta de dos formas muy distintas, una la que se encarga de los dolores de espalda, y otra la que se ocupa del resto de enfermedades.

En cuanto a lo segundo, no hay evidencias sólidas de que sirva para tratar estas dolencias no relacionadas con el sistema musculo esquelético. Y en cuanto a lo primero, como en el caso de la quiropráctica, dependerá mucho del tipo de dolor de espalda.

Si hablamos de dolores lumbares crónicos e inespecíficos, las pruebas de las que disponemos nos dicen que la osteopatía, igual que otras terapias de manipulación de huesos y músculos, son igual de eficaces para tratar dolores de espalda inespecíficos que otros tratamientos como la fisioterapia o el ejercicio terapéutico, que son eficaces para más tipos de dolencias.

La osteopatía fue fundada por Andrew Taylor Still, un médico estadounidense del siglo XIX, cirujano de la Guerra Civil y legislador estatal y territorial de Kansas. Afirmaba que la enfermedad humana tenía sus raíces en problemas con el sistema musculoesquelético y que las manipulaciones osteopáticas podrían resolver estos problemas aprovechando el potencial de autorreparación del propio cuerpo.

A los pacientes de Still se les prohibió el tratamiento por la medicina convencional o científica, así como beber alcohol. Estas prácticas derivan de la creencia, común a principios del siglo XIX entre los defensores de la medicina alternativa, de que el estado natural del cuerpo tiende a la salud y contiene inherentemente la capacidad de combatir cualquier enfermedad. Esto lo vemos por ejemplo en la quiropráctica, que defiende los mismos principios.

A mediados del siglo XVIII, cuando los avances en fisiología comenzaron a localizar las causas y la naturaleza de las enfermedades en órganos y tejidos específicos, los médicos comenzaron a cambiar su foco de atención, del paciente al estado interno del cuerpo, desarrollándose un movimiento más fuerte hacia la medicina experimental y científica.

Bajo la perspectiva de los practicantes de terapias tradicionales (pero no científicas), la simpatía, el trato humano, y el holismo que habían sido parte integral de la medicina hasta entonces, quedaron atrás. La joven medicina científica se convirtió en la convención para el tratamiento de pacientes, con prácticas agresivas como sangrías y prescripción de sustancias químicas como el mercurio, convirtiéndose en la vanguardia de la terapéutica.

La medicina alternativa tuvo sus inicios a principios del siglo XIX, cuando comenzaron a surgir prácticas mucho menos agresivas aunque no necesariamente eficaces, en comparación con la medicina científica. Este es el entorno médico que prevaleció lo largo del siglo XIX, y el entorno en el que Still apareció cuando comenzó a desarrollar su idea de la osteopatía.

 

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Después de perder a su esposa y a sus tres hijas a causa de lameningitis espinal y de constatar que la medicina de la épocal no podía salvarlas, Still se propuso reformar la escena médica ortodoxa y establecer una práctica que no recurriera tan fácilmente a las drogas, los purgantes y las terapias duramente invasivas para tratar a un paciente.

En este sentido fue influenciado por figuras espiritualistas como Andrew Jackson Davis y las ideas de curación magnética y eléctrica, Still comenzó a practicar procedimientos de manipulación que pretendían restaurar la armonía en el cuerpo.

Jackson Davis creía que algunas personas de especial naturaleza, podían contactar con los espíritus de los fallecidos. Creía también que estos espíritus habitarían en un plano espiritual superior al de los humanos, y que podrían aconsejarnos sobre problemas tanto mundanos como espirituales.

La curación magnética y eléctrica, se engloba dentro del vitalismo, del que ya he hablado en otras ocasiones, pero a modo de resumen, diré que el vitalismo sostenía que los seres vivos debían su condición frente a objetos inanimados, a que circulaba por ellos un aliento vital o energía vital que les otorgaba su naturaleza.

En el transcurso de los siguientes veinticinco años, Still atrajo apoyo para su filosofía médica que desaprobaba la medicina ortodoxa y dio forma a su filosofía de la osteopatía. Los componentes incluían la idea de que la estructura y la función están interrelacionadas y la importancia de cada pieza del cuerpo en la función armoniosa de su conjunto.

Estableció la Escuela Americana de Osteopatía el 20 de mayo de 1892, en Kirksville, Missouri, con veintiún estudiantes en la primera clase. En 1892, describió los fundamentos de la osteopatía en su libro "La filosofía y los principios mecánicos de la osteopatía".

Con el tiempo, afirmaría que podía "sacudir a un niño y detener la escarlatina, el crup, la difteria, y curar la tos ferina en tres días con sólo manipular sus vértebras cervicales".

A principios del siglo XX, los osteópatas de los Estados Unidos buscaron establecer una ley que legitimara su título médico al nivel del médico moderno. Los procesos fueron arduos y no exentos de conflictos. En algunos estados, se necesitaron años para aprobar los proyectos de ley. En 1898, el Instituto Americano de Osteopatía inició el Journal of Osteopathy y en ese momento cuatro estados de los cincuenta, reconocieron la osteopatía como una profesión.

Como bien dice Rubén Tovar, profesor de fisioterapia neuromusculoesquelética, el problema es que hay cosas de la osteopatía que sí gozan de evidencia, pero hay otras que no.

El verdadero problema no está tanto en las diferentes técnicas que realizan hoy los osteópatas, como en el razonamiento que hay detrás de estas y la explicación que se da a estas desde la osteopatía.

Cuando una terapia mezcla partes avaladas con otras sin evidencia, hablamos de pseudociencia. El motivo principal para que suceda esto, de igual modo que con su hermana la quiropráctica, reside en la resistencia al cambio en el corpus del conocimiento osteopático. Las ideas de Still se mantienen como un dogma, alejándose del pensamiento científico.

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Un aspecto muy común dentro de la osteopatía es pensar que se pueden diagnosticar alteraciones en la posición de estructuras musculares, esqueléticas, y órganos internos por medio de contactos manuales y que pueden ser corregidas mediante manipulaciones que generan mecanismos de “curación”. También se defiende que se puede corregir la posición del útero u otros órganos, asimetrías de la columna o mover las suturas craneales para influir sobre los fluidos cerebroespinales y regular la función del sistema nervioso. Sin embargo, la evidencia científica es clara, las alteraciones estructurales múltiples se pueden presentar en pacientes sin ningún síntoma, y sin que tengan alteraciones funcionales significativas. También sabemos que manipular o movilizar una estructura articular no cambia la posición a corto o largo plazo, pero además sabemos que las suturas craneales en el adulto carecen de movimiento articular y que la fiabilidad diagnóstica de las técnicas osteopáticas craneales es sumamente pobre.

El creer que moviendo un hueso, que además no se mueve, se va a influir de forma directa sobre una estructura cerebral es falso y bien se puede considerar como un argumento esotérico.

También es común en osteopatía, afirmar que todos los órganos tienen una relación entre sí, por ejemplo, una alteración crónica del tobillo podría generarse por una patología gastrointestinal y el tratamiento de esa afección del tobillo debería incluir la manipulación de estructuras viscerales a demás del tobillo para restablecer el correcto funcionamiento. Sin embargo, la mayoría de estas relaciones orgánicas holísticas son supuestos teóricos carentes de plausibilidad biológica.

 

 

Escucha el podcast Radiografia de la conspiranoia Temporada 2 - 10. Andrew Jackson Davis, el creador de la osteopatía:

 

 

Este es un podcast de Cesc Fortuny i Fabré, de divulgación académica y científica sobre las teorías de la conspiración, así como sectas, estafas y pseudociencias. También brinda información sobre ingeniería social, y como protegerse de ella.

Este capítulo trata sobre Andrew Jackson Davis, el creador de la osteopatía. De la serie Pseudociencias.

Voz para la presentación y la despedida: Marian Raméntol
Locución: Cesc Fortuny i Fabré
Música de la presentación y la despedida: "Tenencia ilícita de almas" K4RK4554
Música del podcast: "El meu nom fondejat als llavis de l'infern" O.D.I.

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Links del podcast:

Principios de la osteopatía
¿Cuáles son los principios de la osteopatía?
La osteopatía, a examen
Preserving the history of osteopathy
Dubious Aspects of Osteopathy
Glossary of Osteopathic Terminology, November 2011 Edition